Publicado el jueves, 01 de abril de 2010
El Ayuntamiento lleva tiempo trabajando en la recuperación de la ribera del Arlanza, aunque no ha sido hasta este momento cuando ha recibido la ayuda necesaria para poder afrontarlo. Porque se trata de una ambiciosa actuación presupuestada en torno a los 200.000 euros que financiará al cien por cien la Junta de Castilla y León. La intención municipal es comenzar las obras cuanto antes, pero tendrá que esperar a recibir los oportunos informes favorables tanto de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) como de la Consejería de Medio Ambiente.
Y es que los 1,5 kilómetros de ribera del Arlanza incluidos en el proyecto están catalogados como zona LIC (Lugar de Interés Comunitario). Esta circunstancia obliga a que el citado departamento de la Junta dé su visto bueno, tras el cual llegará el del organismo de cuenca. No obstante, el alcalde, Julio Munguía, confía en que la respuesta de los organismos públicos sea rápida y positiva para empezar cuanto antes las obras, de tal forma que puedan estar acabadas coincidiendo con la época estival y la afluencia de visitantes a la localidad serrana.
Las tres sendas peatonales proyectadas, que discurren paralelas al curso del río, son en la actualidad caminos de tierra. Por eso, la memoria del proyecto contempla la limpieza superficial del terreno y la eliminación de la vegetación que cubre el paso, para después aplicar una capa de suelo y de zahorra artificial que se rematará con otra de hormigón con acabado de imitación pétrea. En estos paseos se colocarán bancos, papeleras y paneles.
De forma paralela, se reforestará el margen izquierdo de la ribera con especies de ribera autóctonas. Y en otro extremo se instalarán mesas circulares y asadores acordes con el entorno natural que proporcionará al visitante un espacio idóneo para la realización de actividades de ocio al aire libre. La actuación se completará con la colocación de una red de alumbrado compuesta por bolardos con puntos de luz alimentados por energía solar. El plazo de ejecución de la obra es de dos meses.
El deterioro que sufre este espacio se remonta en el tiempo a la época en que no había polígono. Las empresas se instalaron en los alrededores del pueblo y ante la escasez de espacio en sus naves se vieron obligadas a ocupar parte de la ribera. Con la puesta en funcionamiento del parque industrial y el traslado de las factorías, esta zona ha quedado desocupada, siendo visible el desgaste del terreno.
http://www.diariodeburgos.es/noticia.cfm/Provincia/20100401/riber ... 06C704
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