La Iglesia de San Julián es bastante reciente, pero en sus paredes se aprecian piedras que antaño pertenecieron a otras construcciones, de no sabemos que época, pero que nos parecen remotas.
El edificio ha sido restaurado recientemente por el ayuntamiento, pues estaba casi en ruina.
Sólo se celebra misa el día de la fiesta, y por este motivo, el arzobispado se desentiende de su mantenimiento.
En el interior de la iglesia llama la atención una pila bautismal cuadrada, de aspecto arcaico, y con tallas y escritura. En un lado aparece una gran figura humana, con una flor visigótica de 6 puntas encima de ella. En el costado, una frase que aún no hemos descifrado, y un dibujo geométrico. En el otro lado, aparece una representación humana grande, con otra más pequeña en su regazo. También hay un animal grabado casi esquemáticamente.
A nuestro parecer, es de factura visigoda, si no anterior.