La ermita, construida con buenos sillares, tiene una puerta de acceso coronada con arco mozárabe y otra tapiada en el lado opuesto de las mismas características.
Sus canecillos son de lo más primitivo que en estilo prerromanico se conoce y están decorados con cruces y grafitos que representan diversas figuras, algunas de ellas humanas.
No hay datos exactos sobre el año de construcción, pero atendiendo a su estilo, el llamado estilo Condal, puede fijarse en tiempos del conde Fernan González o en los de su sucesor Garci Fernández, entre los años 912 y 995. Aunque algunos autores suponen que su construcción se hizo tres siglos antes.
Visigótica
Cruzando el río, en dirección Contreras, a la derecha de la carretera.