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Salas de los Infantes
Información publicada el domingo, 29 de noviembre de 2009. Administrador
Fidel Torcida posa en la glorieta Sierra de la Demanda, ornamentada con un gran dinosaurio. © Valdivielso
Aunque nació en Santander, con cuatro años su familia se trasladó a Salas de los Infantes. Una década más tarde ya estaba buscando restos y huellas de dinosaurios junto a un grupo de jóvenes que más tarde formaron un colectivo arqueológico, el CAS.
Vive con ilusión y no poca expectación el proceso de evaluación de la candidatura de las icnitas de dinosaurio de la Península Ibérica a Patrimonio de la Humanidad. La decisión final no se sabrá hasta julio de 2010, pero antes se conocerá un informe clave sobre las posibilidades que existen. Fidel Torcida se muestra optimista y confía en la espectacularidad del yacimiento de Costalomo de Salas, así como en el patrimonio de las otras regiones que conforman el proyecto junto a Portugal. En caso de fracaso -sería el segundo en cinco años-, cree que no habrá un tercer intento. Pero en caso éxito, lo vivirá como un sueño cumplido.
El pasado 11 de noviembre dos evaluadores de la Unesco visitaron el yacimiento de Costalomo y el Museo de los Dinosaurios. ¿Qué sensaciones tuvo en las apenas tres horas que estuvieron en Salas de los Infantes?En principio, buenas. El yacimiento de Costalomo se explica por sí mismo, la pena es que no se pueda ver al completo. Se destapó una pequeña parte, más o menos la secuencia de varias huellas. Lo más significativo es su conservación, al aparecer en relieve. Es algo único en el mundo. También se habló de cuestiones de gestión y de la riqueza paleontológica del entorno mostrada en el museo. La cuestión es que los evaluadores no han expresado nada en su gira. Creo que ahora la candidatura es muy buena y lo lógico es que saldría adelante.
¿Fue mejor o peor que la visita del año 2005?No hay nada que se repita. En la primera había muchas expectativas y ahora es como si hubiéramos madurado. Como curiosidad, uno de los evaluadores también repetía. En principio, la candidatura ha mejorado porque, además de la incorporación de Portugal, se ha hecho un expediente con una evaluación profunda que ha dado solidez.
A partir de ahora, ¿qué pasos se tienen que dar?Los evaluadores tienen que hacer un informe para principios de año, y en enero o febrero hay otro filtro para saber si seguimos adelante o no. Si se salva ese obstáculo es muy fácil lo que queda.
¿Por qué tienen que declarar Patrimonio de la Humanidad la candidatura de las icnitas de la Península Ibérica?Hay muchos motivos. Los yacimientos van desde el Jurásico medio hasta el final del Cretácico. Es un periodo muy largo de tiempo en el cual está representada la evolución de los dinosaurios en la Península Ibérica. Tenemos un escenario muy amplio y, por otro lado, en la candidatura hay yacimientos que tienen tipos de huellas únicos en el mundo y muestran ejemplos de comportamientos peculiares nunca vistos, como de caza, gregarismo o grupos. También, en general, son los yacimientos más grandes del mundo en cuanto a huellas, y su conservación es excepcional.
¿Qué aporta Salas al conjunto de la candidatura?La conservación. Tal y como se ha conservado es algo único en el mundo y eso desde el punto de vista científico nos causa muchos problemas. Hay rastros de dinosaurios carnívoros de gran tamaño del Cretácico inferior, hace 130 millones de años, y grandes invertebrados. Tenemos una variedad muy amplia.
Costalomo está considerado el yacimiento ‘bandera’ de la candidatura. ¿En qué se basan?Bandera o escaparate en el sentido de la espectacularidad. El rastro de Atila -un gran carnívoro-, que ahora no se puede ver, te emociona. Dentro de cómo está conservado podemos ver réplicas de los pies y cómo salen las uñas de los carnívoros de la parte superior del dedo, cosa que no vemos en un huella normal. Todo eso da mucha espectacularidad.
Habla a menudo de que no se puede ver. ¿Por qué está tapado?Se excavó en 2003 promovido por la Junta, que iba a declarar BIC los yacimientos de icnitas. Lo que vimos entonces, aparte de emocionarnos, es que era muy frágil. Las réplicas son bultos de roca sobre otra roca y muchos se soltaban. No se podía dejar al descubierto por las condiciones meteorológicas, el agua que corre por la roca al llover y el vandalismo.
¿No hay forma de que pueda verse con protección especial?Nosotros creemos que sí. De hecho, la Fundación del Patrimonio Histórico de Castilla y León promovió un proyecto para poner en valor y conservar tres yacimientos de Burgos, uno de ellos Costalomo. Desde Salas propusimos hacer un edificio; no solo tenía que haber una techumbre sino también paredes y además que el acceso no fuera libre. Desde la Junta nos han dicho que es una solución compleja y cara. La alternativa que proponen es dejarlo tapado y hacer una puesta en valor indirecta con documentales, réplicas... En estos momentos no está por la labor de intervenir directamente en Costalomo.
¿Cómo ha evolucionado el patrimonio paleontológico de la zona desde 2005?Nosotros seguimos investigando en yacimientos de huellas; ha aparecido uno al Este de Lara muy grande e interesante por la edad. Pero lo que más hay son restos óseos, y es ahí donde nos volcamos. Lo que hacemos es seguir con las excavaciones, cambiar elementos expositivos del museo, organizar jornadas internacionales... Además, la Fundación Dinosaurios está a pleno rendimiento. Pero es que desde Salas se cuenta con pocos recursos. No voy a decir que estemos solos, pero la dotación económica es limitada. Todo lo que hacemos sale de los recursos que hay en Salas.
¿Científicamente los yacimientos burgaleses son equiparables o están por encima de otros como los de Aragón?Comparar es difícil. Lo que ocurre en Aragón es envidiable porque las administraciones aragonesas tenían previsto invertir unos 60 millones de euros. Han establecido no solo dinópolis en Teruel, sino un territorio dinópolis con museos en distintos pueblos con yacimientos. Y además se ha invertido desde el punto de vista científico; encuentran un yacimiento muy bueno, están excavando el tiempo que haga falta y luego se obtienen resultados. Para mí Teruel es inversión igual a resultados. Aquí lo que nos falta es mucha más inversión. Hay que concienciarse de que contamos con un patrimonio excepcional desde el punto de vista científico; especies únicas, variedad enorme de colecciones y un montón de yacimientos aún por estudiar. Lo que tenemos en el sureste de la provincia es excepcional, pero nos falta por descubrir mucho más.
¿Cree que si este patrimonio estuviera en otra comunidad su repercusión sería mayúscula?Probablemente... Lo que ocurre es que donde no hay dinosaurios si hallan un solo hueso, eso es... Y aquí como tenemos tantos... Nuestro patrimonio se merece un tratamiento de mucha más inversión. La Junta dice que en la región hay mucho patrimonio, también de otro tipo. Esto es como un segundo plato.
El Museo Regional de Dinosaurios va a tardar en llegar mucho más que la declaración de Patrimonio de la Humanidad...
Si sale adelante el próximo año, está claro que sí. Yo creo que el museo se va a hacer, pero la decisión se está prolongando mucho en el tiempo. Igual nos estamos quedando un poco atrás porque en Asturias, Aragón, Castilla-La Mancha, Castellón y La Rioja hay proyectos muy importantes y en algunos ya se ha empezado a trabajar con presupuestos de 18 millones de euros.
¿Ese retraso puede influir negativamente a la hora de optar al reconocimiento mundial?Bueno, hubiera sido deseable haber presentado Costalomo a los evaluadores en otra situación. El museo que muestra el patrimonio de toda la zona también podría estar en mejor situación y con más recursos.
Y también hubiera sido bueno presentar un proyecto de gran museo...Claro, eso desde luego que influiría positivamente. Sí que es cierto que presentamos proyectos como el de la Fundación del Patrimonio. Creo que en general la impresión ha sido buena.
¿Qué últimas noticias han tenido de la Junta sobre esa actuación museística?Ahora mismo el presupuesto que tiene la Junta para el museo es casi testimonial, 50.000 euros para el próximo año que imagino servirán para definir el proyecto. El atasco está en la parcela. El Ayuntamiento opta por una y desde Valladolid, no lo sé, creen que son mejores otras. No hay un acuerdo. A mí me da la impresión de que falta la decisión de vamos a construirlo ya, en un plazo e invirtiendo tanto dinero.
¿Y cómo se ha planteado el futuro museo?Eso habrá que hablarlo. Nosotros tenemos unas ideas de por dónde puede ir y cómo diseñar la parte expositiva. También debería contar con espacios de almacenamiento para grandes piezas, zonas de investigación, salas de restauración...
En ese museo se podrán ver aquellas restos que se llevaron a Alemania en el año 1969...Es muy difícil que los museos se desprendan de sus piezas. Se lo llevaron a Alemania en una situación de vacío legal y cuando España se encontraba en una posición inferior.
Hoy en día algo así sería impensable...Sería absolutamente ilegal, y si alguien lo hace tendría que responder por ello. Nosotros hemos hablado con la gente de Tubinga y yo lo veo difícil. De todas formas, tenemos unas réplicas de los huesos que se exponen allí.
¿No echa de menos la implicación de la Universidad de Burgos en el proyecto de Salas?En concreto, en la UBU no hay especialistas en paleontología de dinosaurios. De todas formas tenemos una buena relación con investigadores de la universidad, en concreto con el equipo de Atapuerca. Estamos haciendo cosas que aún no han salido a la luz y pensamos que podemos hacer más. Podría ser interesante que perteneciera a la Fundación porque la referencia científica en Burgos es su universidad.
¿Cómo vivirá el día en que se conozca la decisión de la Unesco?Será una fecha muy especial... Imagino que con nervios y con mucha expectación.
¿Habrá tercera vez si no se consigue?Yo intuyo que no, pero depende... Si la pega que se pone es algo fácil de resolver...
¿Y si se consigue qué pasará después?Tendrían que pasar cosas, buenas. A partir de la declaración habría unas responsabilidades por parte de la Administración regional, que es quien tiene las competencias en patrimonio, para conservarlo, para difundirlo a la sociedad y para fomentar la investigación. Para Salas tendría que llegar el museo y más recursos porque es lo lógico. Ahora gestionamos el patrimonio paleontológico con los medios que tenemos, que son pocos, y un patrimonio mundial requiere otro tratamiento, más mimo y más cuidado. La Junta tendría que implicarse más a fondo.
http://diariodeburgos.es/noticia.cfm/Provincia/20091128/junta/ten ... 9C6046
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